MÁS ALLÁ DE LA PERSONALIDAD

 Buenos días; hoy quiero hablarte sobre cómo conectamos con nuestra esencia.

Aunque es cierto que necesitamos ser pacientes y perseverantes durante el proceso de transformación, experimentar nuestra esencia no es tan difícil como tendemos a creer.

En realidad, una de las principales defensas del ego para no hacerlo, es la creencia de que la espiritualidad es algo exclusivo, poco práctico y muy muy lejano. De hecho, está más cerca de lo que creemos, como aseguran los místicos; nos es necesario ir a ninguna parte ni realizar nada. Lo que hemos de aprender, es a dejar de huir de nosotr@s mism@s.

Cuando nos vemos tal y como somos, nuestra verdad y nuestra falsedad, comenzamos el proceso de desaparecer, el hábito de abandonarnos y de vivir inmersos en ilusiones, reacciones y defensas.

Lo bueno es que nuestra esencia ya existe entera y perfectamente. Tú que estás leyendo esto, no necesitas hacer nada para ser real o espiritual. Una vez comenzamos a ver los motivos por los que nos hemos abandonado y hemos renunciado a conectar con el momento presente, esos mismos motivos, pierden la razón de ser.

Comprender nuestro tipo de personalidad, nos sirve para percibir esos "motivos" por los que nos hemos abandonado o nos hemos desconectado del momento presente. Cuando dejamos de intentar ser quienes no somos, surge nuestra verdadera naturaleza: "observamos y dejamos marchar" y dejamos de obstaculizar nuestro desarrollo; dejamos de defender un determinado tipo de autodefinición y comenzamos a sentirnos libres de ser quienes realmente SOMOS.

No necesitamos aprender algo nuevo ni añadir nada para ser nuestra verdadera naturaleza. El progreso espiritual supone ver lo que tenemos ante las narices, en realidad, lo que hay bajo las capas de la personalidad.

El trabajo espiritual es por lo tanto, cuestión de desprenderse, de soltar, de liberarnos y no de añadir nada a lo que ya hay.

Esto puede parecer difícil, porque los hábitos de la personalidad se han arraigado profundamente en nuestro ser; pero podemos contar  con el apoyo de un/a buen/a terapeuta y del universo en este trabajo; la consciencia divina desea que hagamos el trabajo y nos apoya en el proceso. El trabajo interior es por lo tanto, un misterio cuya constante revelación maravilla ver en nosotr@s y en los demás. Hay que tener siempre presente no obstante, que no podemos hacerlo sol@s y no se puede hacer sin nosotr@s. Es importante hacer el desarrollo en grupo, guiado por un/a terapeuta, ya que así tendremos un proceso de desarrollo seguro y además, al hacerlo en grupo, desarrollamos la empatía y la compasión, dos emociones muy ligadas a la conexión con nuestro SER.

Una vez más, te animo a que te inscribas en la formación "Enciende tú corazón" que yo misma imparto, en la que podrás aprender e ir de mi mano y de la de tus compañer@s en este viaje tan especial y a la vez único de la conexión con tu propia naturaleza.

Para más información, puedes enviar un email a: enciendetucorazonformacion@gmail.com o puedes mandar un WhatsApp  al: 615720286; estaré encantada de atenderte.

Recibe un abrazo desde el corazón y acuérdate de compartir.

Comentarios

Entradas populares de este blog

HOY HE ELEGIDO SER FELIZ

NUNCA OLVIDES TUS RAÍCES

MÁS ALLÁ DEL ENCANTO