CUATRO MIRADAS A LA REALIDAD: MIRADA OBJETIVA

 Buenos días; en los siguientes 4 días, voy a hablarte de las 4 maneras diferentes que tenemos de observar la realidad.

En lo cotidiano, la propia existencia es observada desde diferentes perspectivas en función del grado de consciencia. Las miradas con las que se observa esta realidad pueden ser: objetiva, subjetiva, simbólica o trascendente. Esta es una de las razones por las que ante una misma situación, la valoración que hagan las personas será diferente e influirá de manera distinta en su vida. Las creencias y las experiencias vitales impregnan la vivencia de una situación concreta hasta transformarla en una experiencia única.

¿Qué es la realidad?, ¿Es mi realidad la misma que la de los demás?, ¿Experimento mi existencia igual que aquellos que me rodean?

Estos planteamientos y muchos otros son necesarios si se tiene la intención de realizar un trabajo de ampliación de consciencia. Quienes no se hacen preguntas, es difícil que hallen respuestas. La realidad se vive en función del grado de consciencia que se tenga y la observación de lo cotidiano está también en función de ello.

Hoy comenzaré por la mirada objetiva. Esta mirada es la que responde a cuestiones del tipo:

¿Qué estoy haciendo?

¿Qué está sucediendo?

¿Qué está pasando?

Tiene que ver con la situación que se está viviendo y pone de manifiesto las limitaciones y desequilibrios que la persona crea y vive en un momento dado. La persona es capaz de identificar qué es lo que está sucediendo, pero no va más allá, no es capaz de advertir otras complicaciones.

Esta mirada es un primer escalón en la toma de consciencia de la realidad, permitiendo contactar con ella de una manera superficial pero necesaria. No es posible acceder a las otras formas de mirar sin antes haber hecho los aprendizajes relacionados con esta. Los parámetros en los que se sustenta esta perspectiva, habitualmente inconscientes, son los siguientes:

- Lo que sucede es independiente. Según esta manera de ver las cosas, lo que sucede es lo que sucede y nada tiene que ver con la persona a la que le pasa, de igual modo le podía haber pasado a otra persona.

- Lo que sucede tiene un principio y un fin. Tiene que ver con la percepción lineal del tiempo, en la que todo lo que empieza tiene un final. Este puede tardar más o menos en llegar, pero el final llega.

- Lo que sucede es producto de una causa. También tiene que ver con la percepción lineal del tiempo, todo lo que sucede deviene de hechos que ocurrieron en un momento previo. Todo efecto tiene su causa que es anterior en el tiempo.

Estos tres parámetros responden a una realidad consensuada que es la predominante en el mundo actual, sobre todo en la cultura occidental. Es una manera básica de contemplar la realidad en la que se vive, pero como ya he mencionado antes, no es la única.

Mañana seguiré con la mirada subjetiva de la realidad.

Recibe un abrazo desde el corazón y acuérdate de compartir.

Comentarios

Entradas populares de este blog

HOY HE ELEGIDO SER FELIZ

NUNCA OLVIDES TUS RAÍCES

MÁS ALLÁ DEL ENCANTO