UN BUEN HÁBITO: ESCRIBIR UN DIARIO EMOCIONAL

Buenos días querid@ lector/a; hoy quiero recomendarte la toma de un hábito muy saludable: escribir una diario emocional.

Escribir este diario te sirve de llave de acceso a tu mundo interior, ese que tan acostumbrado estás a silenciar y con el que a veces te asusta conectar.

Poner en palabras lo que sientes, es un ejercicio de liberación, de desahogo y de canalización. De alguna forma, la escritura te ayuda a desmadejar esos sentimientos que albergas en tu interior, para terminar por conocerte en profundidad.

Como decía Voltaire: "La escritura es la pintura de la voz".

Escribiendo este diario, tendrás una herramienta que identifica y ventila tus emociones, a la vez que te haces consciente de en qué situaciones reaccionas de una manera determinada y qué es lo que realmente te está molestando de dicha situación. Este archivo de emociones te dará gran información de tu subconsciente y te dará la oportunidad de resolver situaciones de manera diferente al haberlas hecho conscientes mediante la escritura y posterior lectura.

Para escribir un diario emocional, lo único que necesitas es papel y boli y confianza en que vas a escribir lo que llevas guardado en tu corazón. Para ello, debes elegir un momento del día en el que te sientas cómod@ para escribir y es muy importante que te asegures de que nadie te vaya a molestar: "Este será tu momento de intimidad para ti, contigo mism@". Es recomendable que lo escribas al final del día, para que puedas reflexionar sobre cómo ha ido la jornada.

Tómate 10-15 minutos para hacer un balance del día y anota todo aquello que recuerdes, no importa si no es muy relevante.

Escribe cómo te has sentido en cada una de las situaciones. Si al principio te cuesta un poco, puede ayudarte que te hagas preguntas, tipo:

¿Qué pensamientos predominan ahora en mi mente?

¿Qué originó esa emoción?

¿De qué manera influyó en mi comportamiento?

¿Cuál es la emoción que estoy sintiendo?

¿Bajo esa primera emoción, hay alguna otra emoción?

No te preocupes por cómo está quedando el texto; lo importante es que cojas el hábito de escribir el diario y más adelante ya irás perfeccionando la técnica si así lo deseas.

Cuando termines de escribir, léelo, seguro que te sorprendes. También es recomendable volver a leerlo una vez pasados unos días, para que te haya dado tiempo a tomar distancia y a poder observar lo ocurrido con otra perspectiva.

El objetivo de escribir este diario es que seas capaz de reconocer tus emociones, comprender cómo te afectan y ser consciente de cuáles son tus tendencias.

Recibe un abrazo desde el corazón y acuérdate de compartir.