APRENDE A ESCUCHAR Y A ESCUCHARTE

Buenos días querid@ lector/a; hoy quiero hablarte de la importancia que tiene el saber escuchar y escucharte.

Muchos, pensamos que sabemos escuchar, pero seguramente si te paras a prestar atención a cuando alguien te está hablando, en lugar de estar escuchando lo que te está diciendo, te sorprendes pensando en la respuesta que le vas a dar una vez termine. A eso querid@ lector/a se le llama oír, escuchar es algo muy diferente.

Escuchar, significa estar presente para la otra persona. Oír y escuchar lo que tiene que decirte y empatizar con aquello que te está contando. Es sincronizar las respiraciones inconscientemente, al igual que la postura corporal. Nos han enseñado en la escuela que se escucha con los oídos, sin embargo, esto no es cierto. Con los oídos, oímos; sin embargo, escuchar, implica a todo el cuerpo. Gracias al lenguaje no verbal, podemos sentir si una persona nos está escuchando o no.

Ahora bien, igual de importante es saber escuchar a l@s demás como a ti mism@. Escucharte implica conocer tus pensamientos y también tus emociones; de hecho, los pensamientos influyen en cómo nos sentimos.

Para comenzar con la práctica de escucharte, debes buscar un lugar tranquilo. Reserva unos minutos al día para estar y conectar contigo.

Haz varias respiraciones profundas.

Una vez notes que te has calmado, presta atención en cómo te sientes y qué es lo que necesitas.

Tómate tu tiempo y no seas crític@ contigo mism@. A menudo las respuestas rápidas resultan ser superficiales.

Vacía tu mente; esto implica sacar todo eso que te perturba y te impide el bienestar.

Puedes hacerte las siguientes preguntas:

¿Qué me da rabia?

¿Qué me entristece?

¿Qué me enfada?

Cuando respondas a estas preguntas, recuerda hacerlo en primera persona: "Me da rabia...", "Me entristece...", "Me enfada..."

Luego, piensa en cómo te gustaría sentirte en el futuro. Imagínate que aquello que te preocupaba ya se ha solucionado:

¿Cómo te sientes?

¿Qué ha pasado para que todo se solucionase?

Y por último, con los darte cuenta que has obtenido:

¿Cómo vas a resolver la situación para sentirte como te quieres sentir en un futuro?

No hay mayor acto de AMOR que el arte de escuchar, así que, escucha y escúchate.

Recibe un abrazo desde el corazón y acuérdate de compartir.