DESCUBRE EL AVE FENIX QUE HAY EN TI

 Buenos días querid@ lector/a; hoy te invito a descubrir el Ave Fénix que hay en ti.

Aunque te parezca increíble, las emociones negativas pueden sacar la mejor versión de ti mism@; solo debes prestar atención.

Cuando algo "malo" te ocurra, en lugar de preguntarte:

¿Por qué me ocurre esto a mí?

La pregunta correcta a hacerte sería:

¿Para qué me ocurre esto a mí?, ¿Qué es lo que tengo que aprender de todo esto que me está ocurriendo?

Es cierto que las emociones negativas nos traen malestar y sufrimiento: la rabia, la ira, la tristeza, la decepción, el miedo, los celos, la vergüenza, son algunas de esas emociones, sin embargo, es necesario que las tengamos para lograr una mayor competencia personal.

Debes entender que detrás de cada emoción se esconden unos complejos estados que nos impulsan hacia algún comportamiento o a experimentar sensaciones físicas, por ejemplo: la alegría, acelera nuestro corazón, el enfado, nos impulsa a elevar la voz...

Cada emoción sentida, quiere darte un mensaje para generar en ti determinada conducta, para que soluciones aquello que está alterando tu paz interior.

Las emociones están en ti desde el inicio de la evolución con un propósito muy concreto: son medios para que consigas cosas, para que cambies conductas, para que reflexiones, para que tomes conciencia de ciertas realidades.

Las emociones negativas son cruciales para tu existencia. Son clave para que te sientas mejor, para vivir de manera óptima en el mundo y soportar los desafíos a los que te enfrentas.

Hoy en día, está muy de moda la psicología positiva, sin embargo, nadie nos ha enseñado a transitar por la tristeza, a saber qué hay que hacer cuando nos sentimos decepcionad@s o cuando estamos desbordad@s por las repetidas frustraciones.

Nadie nos enseña que para poder valorar la alegría, primero debemos haber sentido la tristeza.

Cuando seas capaz de leer entre líneas lo que las emociones "negativas" quieren que aprendas, harás resurgir en ti el Ave Fénix que llevas en el interior.

Recibe un abrazo desde el corazón y acuérdate de compartir.