ADICT@ A LA SOLEDAD

Buenos días querid@ lector/a; hoy quiero hablarte de la adicción a la soledad.

Es muy común, con la edad, volverse adict@ a la soledad. Después de muchas decepciones, desengaños, enfados, expectativas no cumplidas, frustraciones..., es normal volverse adict@ a la soledad, no te sientas mal por ello.

Después de un bagaje tan pesado, nos vamos volviendo adict@s a la soledad, a sentir paz, a no dar explicaciones, a tener nuestro espacio, a no dejar entrar a cualquiera en el corazón ni en la piel, a ser autosuficientes, a brillar sol@s.

Y desde aquí quiero decirte que todo esto está bien, que nadie te venga a decir lo contrario. Está bien porque has aprendido a aceptarte, a amarte, a quererte, a cuidarte, a poner límites.

Much@s lo llamarán miedo, sin embargo, yo lo llamo AMOR, amor propio, ese que jamás puede faltar en tu vida.

Sin todo lo demás puedes vivir, pero sin amor propio, morirás cada día un poco.

Así que no te de miedo volverte adict@ a la soledad, aunque todo en su justa medida, no por ello debes dejar de socializar, aunque seguramente, ya te habrás vuelto muy selectiv@ con las personas con las que deseas estar y eso está genial, pues te estás cuidando.

Lo que los demás llaman soledad y lo llamo AMOR PROPIO.

Recibe un abrazo desde el corazón y acuérdate de compartir.