Cuatro fases para el cambio

Buenos días; hoy vengo a hablaros de las cuatro fases para el cambio.
Últimamente seguro habéis escuchado muchas veces que nos es difícil salir de nuestra zona de confort y seguramente también habéis comprobado que es cierto; pues bien, con este post, me gustaría que os dieseis cuenta de las señales que nos manda la vida para el cambio y cómo nosotros en nuestro afán de mantenernos en nuestra zona de confort, no les hacemos caso y muchas veces no hacemos el cambio hasta que la vida nos obliga a ello.
Bien, las cuatro fases para el cambio son:
La oportunidad de cambio, la necesidad de cambio, la urgencia de cambio y la ruptura por no cambio.
Las dos primeras opciones, son opciones sanas para el cambio, sin embargo las dos últimas, son opciones insanas para el cambio. Me explico:
Es frecuente escuchar en terapia las siguientes frases: "yo hasta que no estoy entre la espada y la pared no tomo ninguna decisión" o "es que yo funciono mejor bajo presión"; estos comentarios y otros por el estilo y con los mismos resultados permiten entender que normalmente abordamos ciertas situaciones de nuestra vida cuando ya no nos queda más remedio. Esta manera de proceder es bastante insana, sobre todo si se convierte en un hábito.
El momento OPORTUNIDAD DE CAMBIO, se da cuando una situación de la propia vida ha de ser evolucionada o cambiada y es la propia vida la que da indicación de ello a través de señales, coincidencias, sincronicidades, sensaciones, etc.
A veces ese cambio es pequeño, otras veces grande, a veces es un aprendizaje, una ampliación de conciencia o algo más material. Lo que sucede es que la mayoría de las veces, las personas obviamos estas primeras señales y dejamos pasar este primer momento.
Después vendría la NECESIDAD DE CAMBIO, que se da cuando hay algún aspecto de la vida que necesita ser transformado. Puede referirse al ámbito físico, emocional, mental, relacional, laboral, etc.
Cuando llegamos a este momento, la oportunidad ya pasó y se convierte en una necesidad para la persona, aunque ésta no sea consciente de ello.
Llega un momento en que la información presente en el inconsciente, tiene suficiente fuerza como para influir en la vida de la persona, creando situaciones que ponen de manifiesto esa necesidad de cambio.
Ambos periodos, la OPORTUNIDAD y la NECESIDAD, son momentos sanos para el cambio, ya que todavía tenemos tiempo para valorar la situación, buscar consejo, ayuda, diseñar una estrategia, etc; si no aprovechamos estos dos primeros momentos para el cambio (que pueden durar de meses a incluso años) pasaríamos a los dos siguientes momentos:
La URGENCIA DE CAMBIO llega cuando ya la decisión hay que tomarla con cierta premura ya que el tiempo del que disponíamos para prepararnos para el cambio ha pasado y ahora hay que hacer las cosas a otro ritmo. Ya no hay margen para valorar, reflexionar, contrastar y la situación ha de ser resuelta en un plazo corto de tiempo.
Este periodo se denomina insano, porque es donde empiezan los desajustes mentales, emocionales o físicos. Al no aprender a resolver las situaciones, se inicia un periodo de desarmonía en la persona que normalmente empieza en el plano mental.
Cuando la tensión mental y emocional no son suficientes para que la persona tome una decisión, entonces el ser interior hace saltar las alarmas a través de síntomas físicos o somatizaciones que según su naturaleza, grado o forma de afectar, pueden dar información sobre el aspecto emocional o mental que no se está atendiendo.
Es entonces cuando la vida toma las riendas y resuelve a su manera, prodiciéndose la RUPTURA POR NO CAMBIO. Partiendo de la premisa de que la vida es aprendizaje y evolución, la resolución de las situaciones en esta fase suelen implicar lecciones de vida, aprendizajes que se pueden llegar a mostrar contundentes e incluso dolorosos. Se produce una resolución de ruptura en el sentido de que algo acaba rompiéndose: la salud, la armonía, una relación, el trabajo, etc.
Si no se realiza el aprendizaje en esta última fase, se repetirá la vivencia en un futuro, quizás disfrazada bajo otras circunstancias, pero siendo en el fondo la misma lección pendiente.
Esta información está sacada del libro "El viaje del Ego hacia la consciencia" de José Antonio Sande Martínez, libro que sin duda alguna os recomiendo que leáis.
Espero que os haya gustado el post de hoy. ¡Hasta la semana que viene! Acordaros de compartir con vuestra amistades si os ha gustado ;)

Comentarios

Entradas populares de este blog

HOY HE ELEGIDO SER FELIZ

NUNCA OLVIDES TUS RAÍCES

MÁS ALLÁ DEL ENCANTO