SIEMPRE ES BUEN MOMENTO

Buenos días, querido lector; hoy quiero regalarte esta reflexión a modo de cuento...

SIEMPRE ES BUEN MOMENTO (Cuentos para leer)


Había una vez una increíble comarca llamada Villa Alegría en la cual habitaba un sin fin de amables ratoncitos, todos convivían en armonía. 

Aquí también vivía una simpática y trabajadora ratoncita llamada Emy, 

Emy ratoncita se pasaba trabajando todo el día y casi nunca tenía tiempo para disfrutar la vida, dedicarse a ser su prioridad o convivir con su padre  el Sr. Tin Ratoncin quien vivía a poca distancia de la casa de la  ratoncita.

El Sr. Tin Ratoncin siempre le hablaba por teléfono para saber cómo estaba, sin embargo, Emy ratoncita casi  nunca contestaba su llamada.

__ Hija te hablo para saber cómo estás, recuerda que siempre estoy disponible para ti__  Tin Ratoncin dejaba mensaje de voz.

Peto Emy ratoncita vivía sumergida en su trabajo en el que constante por su dedicación y empeño,  recibía felicitaciones.

__ Felicidades por su entrega al trabajo es usted admirable __ Felicitaban a Emy ratoncita 

Transcurría el tiempo y el Sr. Tin Ratoncin motivado por el amor de padre, insistía en querer saber de su hija, no perdía la esperanza de que algún día su llamada fuese contestada.

__ Sería magnífico escuchar  su voz __ Se dijo el Sr. Tin Ratoncin 

Cierto día el Sr. Ratoncin enfermó, entonces no se pudo  ponerse en pie, sin embargo anhelado resistía a la enfermedad únicamente pensando en el bienestar de su hija.

__ Ojalá pronto recupere mi salud para poder llamar a mi hija __  Murmuró el Sr. Tin Ratoncin  Emy ratoncita no extrañaba su llamada porque nunca prestaba atención a la disponibilidad de su padre.

La situación del Sr Ratoncin se agravó y al hospital tuvo que recurrir.

__ ¿Tiene familia Sr?__ Preguntó la señorita trabajadora social. 

__ Si una hija y me ama __Contestó Tin Ratoncin.

El Sr. Ratoncin estaba enfermo, decaído y triste, pero los médicos no encontraban el origen de su enfermedad que no parecía ser muy buena.

Un día que Emy se dirigía para ir a  trabajar se encontró con una ratoncita quien era su vecina.

__ ¡Buen día Emy! Me saluda a su padre __ Dijo La ratoncita su vecina 

Emy ratoncita saludo pero reaccionó al darse cuenta que tenía mucho tiempo de no saber de su padre, enseguida volvió a su casa para llamarlo, pero  al revisar el auricular descubrió un sin fin de  sus  mensajes, 

Y aunque eran diariamente pero después de muchos días no había recibido nada.

Emy realmente se preocupó .

__ Tengo que saber cómo se encuentra mi padre __ Se dijo Emy

Emy ratoncita no disponia de mucho tiempo para  asistir a trabajar pero  optó por ir a casa de su padre. 

Por primera vez Emy  daba prioridad a lo que verdaderamente importaba.

Al llegar a la casa encontró una nota del trabajo social, el sitio se veía descuidado,  triste y abandonado. 

__ Familia del Sr. Tin Ratoncin, favor de recurrir al hospital porque su estado de salud no es conveniente Atte.  Hospital__

Emy ratoncita se dirigió muy preocupada al hospital, 

Al verla su padre sintió

__ ¿Cómo estas hija? Recuerda que siempre estoy disponible para ti __ Murmuró el Sr Tin Ratoncin 

Emy no podía hablar al darse cuenta  de su ingratitud y gruesas lágrimas corrieron por sus mejillas, se quedó sin palabras ante el inmenso amor que su padre demostraba.

__ No padre ¿Cómo estás tú? Yo siempre debo estar y estoy disponible para ti __ Contestó Emy ratoncita 

Emy ratoncita permaneció al lado de su padre hasta que  se restableció Y fue su amor, su compañía, su consideración, su agradecimiento, su dedicación y su empeño la dosis perfecta para que su padre recuperará su bienestar, 

Asombrosamente el amor curó du corazón enfermo de tristeza.

Emy entendió que,  a pesar del tiempo perdido y de su ausencia en la vida de su padre lo amaba mucho y quería hacerle saber su cariño, porque comprendió que nunca es tarde para recapacitar ante sus ausencias, y aprendió que siempre es un buen momento para rectificar errores, para recuperar momentos, para convivir con los seres queridos y para brindar su compañía, su tiempo y su  afecto, asimiló que ninguna posesión temporal reemplaza el amor a los seres queridos. 

Emy ratoncita y Tin Ratoncin fueron muy felices por siempre disfrutando de su compañía en Villa Alegría.

                                       FIN

Autora: Amparo Martí 

TE Contare UN Cuento, Amparo Martí. 

H. Matamoros, Tamaulipas, México


Recibe un abrazo desde el corazón y acuérdate de compartir. 

💛💛💛💛

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